Camino despacio para no transpirar mi agua y electrolitos, camino despacio porque me gusta estar sola, mas no siempre puedo o quiero, camino despacio mientras disfruto de la brisa y del paisaje, brisa que despeja tristezas, paisaje que me contenta. Pero a medida que avanzo, acelero mi paso, el sol se hace intenso y sus rayos perforan mis poros, mientras ahora gente aparece indeseadamente en este espacio, que no es tuyo, ni mío, tampoco de ellos. Espacio que compartimos, del que nadie es dueño, espacio en el que sólo somos piezas flotantes de un sueño, espacio que poco a poco nos adentra en la realidad, realidad que no deseo vivir... en este momento. Realidad que llega y desagrada, imponiéndose ante mí, y que sin embargo, no es opción dejarse sufrir, ¿que no siempre se logra? es así, pero nos toca no echarnos a morir. A pesar de todo, siempre podré retomar ese sueño de andar... Y sentir eternamente la brisa, y observar por siempre el paisaje... Sin ti,
Prosas apestosas, inconformidades constantes, situaciones menos relevantes, confesiones fugaces. ¡Restablece ideales, destapa tu mente y libera a tu demente!