Imágenes que sensibilizan, escenas que hacen llorar, letras y melodías que alteran emociones... En ocasiones las razones de sus efectos son más que evidentes, en otras desconocemos el origen de esos efectos. Quizás la respuesta esté en nuestro insconsciente, o solamente escondida en un rincón de nuestro consciente. Quizás la respuesta podría conocerse en una sesión de hipnosis o tan sólo indagando en nuestro pasado, presente y deseos futuros. El caso es que son de esas cosas que nos hacen recordar que tenemos sentimientos y no sólo aquellos de desprecio o de victorias incesantes, sino esos vestidos de ternura, de empatía, de bondad, humildad, de sutil felicidad... Para algunxs puede ser un descubrimiento novedoso, para otrxs de repente resulte ser un re-descubrimiento continuo. Seas del caso que seas, siéntelos hasta el último nanogramo, mantenlos presentes y si los olvidas, recurre a esa sustancia que te haga vivirlos de nuevo... Suficiente desastre hay en l
Prosas apestosas, inconformidades constantes, situaciones menos relevantes, confesiones fugaces. ¡Restablece ideales, destapa tu mente y libera a tu demente!