No sé por qué a la gente llega a costarle tanto hablar claro...
Debería ser una tarea fácil,¿no?
Ya sé que el verdadero temor es a la otra persona, a su reacción, etc. Pero vale... Todo es cuestión de buscar las palabras adecuadas, pero SIEMPRE ser sincero. Y si no consideramos elegir las palabras correctas, ¡qué demonios! Mejor las decimos como salgan y ya. Pero no andar engañando al otro, o haciéndole creer cosas que no son.
De repente estas situaciones podrían cambiar, si la gente fuera menos enrollada... Tanto el que tiene algo que decir, como al que le toca escuchar. Porque parte de ese "temor" al que me refiero, está asociado a una reacción llena de ira o también a una melodramática.
Así que al parecer, según yo, si la gente fuera más relajada y desearan completamente saber las verdades, también hay que ofrecer cierta confianza para que el otro hable sin mucho problema.
Desde el niño que rompió un jarrón -con o sin intención-, hasta el chico que no quiere terminar con la novia porque le da lástima, pasando por esa amiga a la que se le ve mal la ropa que se puso.
Si esa madre le da la confianza a su hijo de que por ese "accidente" no le estará formando un peo, lo agredirá, etc, sino que más bien buscará orientarlo, ese nene seguramente dirá más rápido la verdad. Y si la novia que está a punto de ser "botada" no fuera una dramática, intensa y entendiera que lo que comienza, tarde o temprano termina, y que la vida es un ciclo y nada es estático y que cada persona que llega a la vida no necesariamente tiene que permanecer por la eternidad ahí, o aprendiera a aprovechar los momentos que vivió, estoy segurísima de que ese chico no tendría problemas en dar las razones -o no- de la toma de su decisión. Y si una como amiga, no temiera hacer sentir mal a la otra por decirle que lo que se puso no le cuadra, se le diría de una: Mira mamita, ¿qué tal si te quitas esto y te colocas más bien aquello?
Pero nooo... Nos dejamos llevar demasiado por nuestros sentimientos, olvidando que al final, lo que de verdad valió es que hayamos sido sinceros y que, pronto para unos, tarde para otros, será mejor así ^^... Tanto para la otra persona como para nosotros mismos. Porque más vale un mínimo temor al inicio pero luego ser capaces de decir la verdad, que toda una vida guardándose el más mínimo comentario por no querer "lastimar" al otro.
Sin embargo, recordemos no ser extremistas... Tampoco la idea es que puedan ser tomados como insultos esos comentarios. Por eso, como digo al inicio, todo es cuestión de elegir las palabras adecuadas, pensarlas y no precipitarnos...
Mgm.
Comentarios
Qué fino que comentas, nena! :P