Si no te gustan los animales, o más específicamente los perros; si estos te dan igual y no conoces de empatía, entonces mejor no leas (ni siquiera terminarías de hacerlo).
Dije que dedicaría un post a Nano y Kahlúa. El detalle es lograr no alargarme taaaaanto. Ellos son mi par de hijos... A ese concepto se parecen más. No son simples mascotas, no son hermanos, ni primos. Son los nietos de mi madre. Ella los consiente y yo los regaño, los baño, les doy las medicinas. Aunque debo darle el crédito a la abuela por lavar sus camitas y sábanas y cuidármelos si me escapo un día :D.
Nano fue el primero, adoptado en diciembre de 2010. Nacido en alguna empresa ubicada en La Victoria, fue rescatado junto con sus hermanitos por una chica llamada Michelle, metida en el peo animalista desde hace bastante tiempo. Nació con un defecto en su cadera lo que no permitió que su fémur encajara en esta por lo que no dobla su pata. En este video lo conocí http://www.youtube.com/watch?v=tVOnPwUhAhE&feature=g-like
Siempre preguntan "ayyyy, ¿qué le pasó?" con aquel drama. Pero para él, como en muchísimos otros casos, su condición no impide nada (excepto que teme bajar de la cama luego que se sube). Nació así, no conoce otra manera y no hay drama. Listo.
A los pocos días de tenerlo, tuvo su primera salida larga a San Juan de los Morros. Sería mi compañerito de viaje para visitar a unos amigos allá. Lo llevaba en un bolso, no se orinó ni se inquietó.
En general es un buen chico. Muuuuy juguetón, exageradamente sociable (aunque con el tiempo se puso agresivo con algunos perros), siempre acostumbrado a la gente grande y niños. Celoso como todos los canes; si le hacemos cariño a Kahlúa viene con su escándalo a buscar atención.
Es demasiado cuchi. Todos tienen que ver con él: ya sea por su defecto congénito, por su pelaje o su actitud. También es un miedoso que a veces se la quiere dar de malote. Siempre fue muy sumiso. Le encanta el frío; puede pasar toda la tarde afuera recibiendo brisa. Y su lugar para dormir es debajo de mi cama.
El día en que llegó :') El mes siguiente (enero 2011).
Hace pocos meses :)
Pura guapura (agosto 2011)
Este pana es medio desastroso. Cuando creíamos que ya era serio para orinar solo en el periódico, se antojaba de salir al pasillo del edificio y dejar su gran charco. Era una máquina de orina y caca. No sabía cómo podía salir tanto contenido de excreción de un ser tan pequeño o_o. Hace caso cuando le provoca; ya esos días en que se mantenía a mi lado sin necesidad de la correa, desaparecieron. Así que debe ser paseado amarrado. De vez en cuando genera unos ladridos muy chillones. Nos metemos con él por lo jeva que suena xD.
Kahlúa... Oh, Kahlúa. Esta señorita fue víctima de maltrato animal. No sé por cuánto tiempo, no sé qué más cosas inhumanas le hicieron. Fue rescatada por Yiyi Maiola en los alrededores de la calle del hambre de san Jacinto, con una escabiosis bien grave y con un temor imagino aún mayor. Según mis cálculos, debió ser recogida aprox. a los 6 meses. Yiyi la trató por varios más en su casa y tuvo muchísimo tiempo difundiendo su información para ser adoptada. Contando su historia, mostrando su progreso... Pero, los intentos eran fallidos.
Ella nunca estuvo en los planes de adopción. Pero después de que recogí a un perrito -Huesitos- que murió a la semana, pensé en que si mamá había asumido que nos quedaríamos con él, no tendría problemas en aceptar a Kahlúa.
Le conté su historia. Me frustraba que nadie la adoptara. Le mostré las fotos... http://www.facebook.com/media/set/?set=a.474374513301.251239.325528318301&type=3 este es su álbum. Son algo heavy las imágenes. Mi madre no tuvo problemas cuando le dije que estaba esterilizada, así que cero preocupación por futuros cachorros ni por la menstruación, etc.
En febrero me la trajeron y fue toda una experiencia. La subí cargada y llegó temblando. No bajaba las escaleras sola. Al principio la cargaba pero luego, en su miedo, me alertaba que no me le acercara. Y tampoco quería ser mordida xD. Cuando lograba agarrarla, me ponía a bajarla lentamente, pata por pata para que viera que no había nada que temer. Al final optamos por colocarle una pechera, para obligarla sin lastimarla y al cabo de una semana, ya se atrevía a bajar sola. Pero antes de lograr eso, chillaba en cada oportunidad que bajábamos con Nano hasta que regresábamos. Ella no podría quedarse sola. Siempre pienso en que si le pasara algo fatal al negro, tendríamos que conseguirle pronto otro compañero.
Nano la recibió bien, como a todos. Al poco tiempo ya se ponían a jugar y corretear en el poco espacio del apartamento. Había sido más decente en cuanto a quedarse cerca de nosotros mientras caminamos. Pero agarró confianza y se la da de rebelde. Para el inicio, aún tenía secuelas de su escabiosis; la tratamos y listo. Recuperó los pocos pelitos que le faltaban.
A ella la dejaba sin correa cuando paseábamos por acá. Pero las medidas debieron cambiarse. Tiene un "no sé qué" con algunas personas, en especial hombres. Si pasaba alguien empezaba a ladrarles. Si veía niños a veces creía eran juguetes y quería perseguirlos y agarrarlos por los pies como hace con Nano. Además que es la propia carroñera: siempre quiere ver qué consigue para comer (lo cual nos preocupaba porque corría el rumor de que alguien colocaba veneno) y le encanta revolcarse en cosas podridas... Desde comida putrefacta hasta animales en descomposición. Ya se imaginarán los olores.
No le gusta dejarse bañar. Tengo que trabajarla para lograrla meter en el baño. Lo importante: no ataca ni se pone obtusa después que ya está dentro.
Es super desconfiada, se la da de odiosa y al mismo tiempo es muy afectiva. Aunque su manera de demostrarlo nos duela. Si llegamos a casa, chilla, nos muerde, nos brinca (aunque conmigo se controla más, mi mamá la alborota). Y es una vaga: empezó a montarse en la cama sin que le dijéramos. Así que inicialmente va a su colchonetica y en plena madrugada se va a mi cama xD.
Lo más gracioso: mi mamá decía que ella no iba a estar montando animales en su cama. Pero fue la primera en hacerlo, jojó. Mujer fácil.
Aún tiene sus momentos de desconfianza. Le ladra a la gente cuando llega y si son hombres que no conoce, peor aún. Pero es muy tranquila y no escandalosa como Nano. Ellos encajaron bien. Y le tiene DEMASIADA paciencia. Ella se acuesta y Nano le ladra lo más cerca posible para que le haga caso y ella no quiere :3. Sus ladridos aturden en esos momentos. Pero ni modo, preferirá eso a estar sola.
La señorita es medio enfermiza. Prefiere el calor y en las épocas de humedad, alguna gripe le da. Hace poco nos enteramos de que tiene rinitis alérgica. Lo bizarro es que esa es la enfermedad que no se despega de mí.
Es una tipa amistosa con los demás perros (aunque no algunas perras y determinados canes más pequeños de edad), pero no tanto con la gente. Y es demasiado protectora... Si cree que Nano se ve amenazado de alguna manera, va y se rebela.
Es también una cazadora. Todo lo que se mueve lo quiere atacar. Por eso su relación con los gatos no es muy buena. Se acerca por curiosidad pero en lo que un gato ataca, se arma la sampablera. Así que, el día en que conviva con felinos, preferiblemente que los conozca desde chiquitos y si no, será una ardua tarea crear un nexo o que al menos no se ataquen.
Tomarle fotos a ella es más complicado. Se antoja de irse o girar la cara.
1era foto: El día en que llegó.
2da foto: Aún con los pelones en sus orejas.
última foto: Momento épico jugando xD.
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